🚀 ¡LIBERTAD! ASTRONAUTAS ESCAPAN DE SU SECUESTRO ESPACIAL Y REGRESAN A LA TIERRA EN UNA NAVE QUE SÍ FUNCIONA
Después de nueve meses de vivir en el espacio como si fueran refugiados de la NASA, los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams finalmente lograron abordar una nave que no tenía fallas técnicas ni promesas rotas. Su misión inicial de ocho días se convirtió en un reality show no autorizado llamado "NASA: Perdidos en el Espacio, Edición Boeing" gracias a la increíble capacidad de esta empresa de hacer naves espaciales que son básicamente carísimas piñatas con cohetes.
¿Qué pasó? Pues nada más y nada menos que Boeing entregó un Starliner con más problemas que una telenovela de Televisa. ¿Resultado? Los astronautas se quedaron varados en la Estación Espacial Internacional esperando un rescate que tardó tanto en llegar que ya estaban pensando en hacer su propia colonia intergaláctica.
Pero llegó Elon Musk a salvar el día (y de paso promocionar su nave como si fuera un comercial de Tesla). Su Crew Dragon, una nave que sí despega y sí aterriza, los trajo de vuelta a la Tierra, porque al parecer, depender de Boeing para regresar era más peligroso que un billete de 500 en una fiesta de XV años.
¡Y claro que la política no podía faltar! El presidente Donald Trump no dejó pasar la oportunidad de meter su cuchara y acusar a Joe Biden de haber “abandonado” a los astronautas en el espacio. Según él, Biden no los rescató porque estaba demasiado ocupado buscando las llaves de la Casa Blanca. Y como buen fanboy de Musk, Trump celebró el regreso como si él mismo hubiera piloteado la nave con gorra de camionero puesta.
Wilmore y Williams, visiblemente aliviados de no tener que cenar más comida enlatada con sabor a decepción, fueron recibidos en la Tierra como héroes interplanetarios. Williams, quien ya suma 608 días en el espacio (más que cualquier relación promedio en la Tierra), dijo que lo primero que hará será abrazar a sus perros, quienes probablemente ya la den por perdida en otra galaxia.
Mientras tanto, Boeing sigue en modo fantasma, tratando de explicar por qué su nave funcionó peor que un tráiler en subida. Y la NASA, en un esfuerzo por evitar futuros cringe moments, ya debe estar considerando comprar sus próximas naves en Amazon con entrega al día siguiente.
Lo cierto es que si algo nos deja esta misión es una lección clara: en el espacio, el verdadero peligro no son los asteroides ni los extraterrestres... sino confiar en Boeing para que te lleve y te traiga. 🚀🔥
No hay comentarios
Publicar un comentario